La misma actitud tiene el que nos aparece en el canecillo nº VIII del ábside de San Cipriano de Bolmir, en el que vemos la figura de un hombre sentado con los brazos cruzados sobre el pecho, siendo éstas de un tamaño excesivo.

 

Réplicas semejantes las encontramos también en iglesias francesas, en donde algunos de los más recientes estudios nos las muestran como supervivencias de "Príapo". Así los podemos ver por ejemplo en Champagnolles, iglesia de Saint-Pierre; Poitiers, catedral de Saint-Pierre, Limoges (canecillo actualmente en el museo), etc. (GAIGNEBET, C. y LAJOUX, J. D.: Art profane et religión populaire au moyen âge, pág. 194-95)

 

Rasgos muy similares son los que nos ofrecen los canecillos de San Juan Bautista de Villanueva de La Nía, Gama, San Lorenzo de Pujayo, y San Cipriano de Bolmir, Castañeda, Revilla de Santullán, en los que se ven claramente figuras varoniles ostentando sus órganos genitales, aunque de algunos sólo queda su huella.

 

                Villanueva de La Nía                            Gama                                       Pujayo                                Bolmir

 

                                                                        Castañeda                      Revilla de Santullán  

 

Iconografía semejante, mutilados o no, aparecen también en otras muchas iglesias, no obstante, por la posible actitud que muestran, quizás se trate más bien de actos onanistas.